¿Se cumplió por completo lo que Dios quería para David?
Vamos a hacer algo, leamos 1° de Crónicas 22:6-8
Quiero dejarte éste pensamiento para ayudar: "Dios es capaz de renunciar a sus sueños para protegerte".
Al encontrarme con éste pasaje,
el cual es el motivo por el cual he escrito éste estudio, más para mi vida que
para la de ustedes, me puse a pensar en las razones antes presentadas y la
relación de Dios con David, el cual siempre fue mi ejemplo debido a que soy
músico, y Dios hablando a mi corazón me ponía esta duda en mí: ¿Será que Dios
de verdad no quería que David construyera el templo?
Porque después de todo lo que
David pasó, de las guerras que hizo y ganó, de lo que peleó en nombre de Dios,
después de que Dios encontrara gracia a tal grado de ser perdonado en múltiples
ocasiones (Eso sí, siempre pagó las consecuencias), ¿Dios le negó uno de sus
más grandes deseos en su corazón a David? David logró amar a Dios de tal manera
que ya no le importaban las “bendiciones de Dios” sino que él quería a Dios
mismo, tanto que quiso hacer un lugar para que el arca del pacto, que
simbolizaba la presencia de Dios en aquel entonces tuviera un lugar de
habitación entre el pueblo.
David quería construirle una casa
a Dios como ninguno, es lo que más anhelaba, pero, ¿Sus pecados tuvieron algo
que ver en esto? La verdad es que escrito está: “Tus pecados te alcanzarán” (Números
32:23), pero lo que debe reinar en ésta situación es la soberanía de Dios.
¿Sabes qué? Cosas similares a éstas pasan con nuestra vida, hay cosas que por mucho que las anhelemos, no
conseguimos y ni las conseguiremos quizás, pero para entender por qué, debemos
analizarnos nosotros mismos, la escritura nos da claras razones, una es la
soberanía de Dios, ésta funciona debido a que Dios conoce el principio y final
de los tiempos, por lo tanto sabe las decisiones que tomaremos, así que Dios
sabía lo que David haría, que sería tan apasionado por Dios como nadie, pero
que así mismo se equivocaría en algunas cosas, sin embargo, le dio
oportunidades de redimirse, así como toda nuestra vida entera es una
oportunidad entera para redimirnos de nuestros pecados gracias al sacrificio de
Jesús.
Otra razón, es para que al igual
que Moisés, no se le llegara a tomar como alguien “Extraordinario digno de
culto” para el pueblo judío, puesto que como ya sabemos muy frecuentemente caía
en idolatría, por lo que tras la gran era de riqueza que trajo para Israel, y
además construir el templo de Dios, corría el peligro de ser “Alabado” más que
Dios.
Y la otra es que Dios no quería
que David se enorgulleciera demasiado y se volviera soberbio, es cierto, David
ya tenía muchos triunfos en su haber, pero imagínate que construyese “El Templo
Más Hermoso De La Historia” también, ¿No crees que sería una oportunidad para
que el orgullo de David creciera?
Dios a veces no nos permite
crecer o alcanzar algunos de nuestros sueños por estas razones, puesto que él
quiere que sigamos siendo humildes y cercanos a él, para que no nos alejemos de
su propósito y nuestra alma se pierda en vanagloria, es por esto y no porque no
te ame.
Imagínate que tú te hubieras
ganado la lotería y ya no tuvieras necesidad de nada ¿Seguirías pidiéndole
tanto a Dios? ¿Seguirías sirviendo igual en tu iglesia? O imagínate que
hubieras pasado la materia más difícil, aquella que dejaste por unas centésimas
¿Te sentirías igual? ¿No pensarías que eres el más inteligente de tu generación
y que por tu capacidad superior has superado esto y sin ayuda de Dios lo
hiciste? ¿Si estuvieras en pecado y obtuvieras logros, no pensarías que Dios no
castiga? Amigo mío, cada caso es distinto, pero de cierto te digo, que escrito
está: “A lo que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien” (Rom. 8:28)
Tómate un tiempo para meditar en
esto, y si aquí encontraste la respuesta que estabas buscando, Dios te bendiga,
y si no, es información importante que puede que algún día la necesites, así
que échatela a la bolsa.
Quiero dejarte éste pensamiento para ayudar: "Dios es capaz de renunciar a sus sueños para protegerte".
David no pudo cumplir los sueños de Dios, sin embargo, Dios le siguió amando y le fue fiel a su promesa, y así será contigo si tratas de poner en práctica su palabra, y, querido amigo, el primer paso es buscar un "ajuste de cuentas", ¿Estás cumpliendo los principios de la palabra? ¿Cómo está tu relación con Dios? Respóndete eso, y busca mejorar, pídele ayuda a él para que puedas cumplir los sueños que Dios ha tenido con tu vida, porque son mejores que tus mayores y más grandes sueños por mucha imaginación que tengas. (Isaías 55: 9)
José Ricardo Magaña
Comentarios
Publicar un comentario